En
el presente artículo se trata de presentar el estilo de vida de las tres últimas
generaciones de españoles en tres pasos.
A saber:
A saber:
1ª.Generación, desde…
hasta los años 1970
2ª Generación, desde los
años 1970 hasta 1990
3ª Generación, desde los
años 1990 hasta…
A la 1ª generación la
podríamos llamar como la que
construyó
España.
A la 2ª generación la
podríamos calificarla como los
que han gastado aquello que sus padres
consiguieron con tanto sacrificio.
A la 3ª generación la
vamos a llamar la de los
endeudados por encima de sus
posibilidades.
“Siempre que se analiza
lo que ocurre en una empresa o una sociedad, debemos buscar las causas que
provocan su situación, porque sólo trabajando sobre las causas, puedes cambiar
los efectos”.
No tengo duda de que una
de las principales causas de la prosperidad que vivimos en los años pasados fue
la actitud de la generación de nuestros padres. Y una de las principales causas de la crisis,
es haber perdido esa actitud “.
La 1ª generación, en la actualidad, tenemos en torno de 70 a 80 años, y nuestros idearios han sido siempre un ejemplo de trabajo, honradez, austeridad, previsión y generosidad. Pertenecemos a una generación a la que nos tocó lo peor: De jóvenes trabajamos para nuestros padres y de casados, lo hemos hecho para nuestros hijos.
Esta 1ª generación
éramos gente que veíamos el trabajo como una oportunidad de progresar, como algo
que nos llevaba a un futuro mejor, y nos entregamos a ello en condiciones muy
difíciles. Somos una generación que compraba las cosas cuando podíamos y del
nivel que nos podíamos permitir, que no pedíamos prestado más que por estricta
necesidad, que pagábamos las facturas con celo, y ahorrábamos un poco “por si
pasaba algo”. Que gastábamos en ropa y lujos lo que la prudencia nos aconsejaba.
Nos bañábamos en ríos cercanos, disfrutábamos de la tortilla de patatas y
embutidos, en los domingos veraniegos con familia y amigos. Y tan sensatos,
prudentes y trabajadores éramos que constituimos un gran número de las grandes
empresas que hoy conocemos, y que dan trabajo a la mayoría de los españoles.
Sabíamos que el esfuerzo tenía recompensa y la honradez formaba parte del
patrimonio de cada familia. Se podía ser pobre, pero nunca dejar de ser
honrado
Para nosotros la
democracia significaba libertad, posibilidades y seguir viviendo en armonía y
respeto. Pero cometimos los dos
peores errores imputables a nuestra generación:
1º. ¡Que mis hijos no trabajen tanto como trabajé
yo! Con esta forma de pensar, nos cargamos la cultura del esfuerzo y del mérito
de un plumazo convirtiendo el trabajo en algo a
evitar.
2º.
Como teníamos unos ahorrillos ¡Hijo, tu gasta, que para eso estamos nosotros,
tus padres! Y entonces, con esa manera de pensar surgió la segunda generación.
Años 70 a 90 (Segunda generación)
Años 70 a 90 (Segunda generación)
- La generación de los
nuevos ricos.
- Los
pelotazos.
- Del gasto
continuo.
- De la
especulación,
- De la ingeniería
financiera,
- De la exhibición del
derroche,
- De lo quiero todo y lo
quiero ya,
- La de: “ papá dame
”…
Y todos se volvieron
“ricos” (en apariencia); todos se convirtieron
en gastadores empedernidos.
¿Os acordáis de cuando nuestros padres y abuelos iban a Toro, por supuesto en burro? Siempre llevaban su talega con la fiambrera de rigor y el barril de vino, para comer en la posada o en un
parque próximo. Hacer eso hoy te tacharían de paleto, ahora se sale a
cenar a restaurantes todos los fines de semana ¿Y qué decir del vino?
Pasaron del Don Simón con Casera, al Vega Sicilia. El vino a granel ya no está
“bueno”, ahora el embotellado y mejor si es de "crianza" tiene mejores matices y
mejores sabores por su convivencia con el roble. Esto, por supuesto, a golpe de docenas de euros, ¡Y es que pocas cosas cuestan tanto, como
ocultar la ignorancia!
Pertenecen a la 3ª
generación, los que aspiran a endeudarse para demostrar que son ricos. Increíble pero
cierto.
- ¡Si sólo debes 100.000
€ es que eres un cutre! ¡Mira, nosotros debemos ya 300.000 y nos están
estudiando una operación por otras 300.000 más por la compra de un chalet en la Sierra!.
-
¡Vosotros sí que sabéis sacar provecho al sistema… Ojalá yo algún día pueda
deber esas cantidades!.
-¡Cuánto envidio tus
préstamos!
En Alemania no daban
abasto a fabricar Mercedes, Audi, BMV
para los españoles, con créditos, claro está. Irrumpió Europa en nuestras vidas
y llegó en forma de infraestructuras que producían comisiones para todos los
involucrados.
Irrumpió en la escena de sus vidas Mario Conde, mito a seguir por los jóvenes del momento, que veían
en él una persona inteligente con dotes especiales para llegar a ser rico en
poco tiempo
¡¡¡Viva el pelotazo,
Viva la especulación y viva la corrupción!!!
Se
llenó España de innumerables corrompidos, oportunistas y sinvergüenzas, fueran
políticos, empresarios o banqueros… ¡¡¡Todo vale con tal del enriquecimiento
rápido, aunque fuera a costa de los demás !!!
¡Ah! y no podemos olvidar otra irrupción, entre las dos últimas generaciones, nos referimos a "Rumasa" que tocaba todos campos empresariales, que si, luchaba contra el paro ¡pero a que costa!. Cuando le parecía daba liquidez a las empresas dejándolas arruinadas, con grandes deudas a la Seguridad Social, paro que costeábamos todos los españoles y la obligación del estado de hacerlas viables a base de dinero público; no sin antes enviar, como ha quedado demostrado, todos los beneficios a bancos suizos. Pasaban unos años y regresaba sucumbiendo "de mártir", por los mismos derroteros: creando nuevas empresas con la denominación de "Rumasa 2" y ocurrió lo mismo, pero aun más agravante ya que afecto a pequeños ahorradores; esta vez creaba depósitos llamados "Rumasinas" para ahorradores fieles o avariciosos que, engañados por los desorbitados rendimientos que ofrecía, al cerrarse el circo todo lo perdieron. Podíamos decir que era un gran fraude de guante blanco. Esperemos que no vuelva a surgir "Rumasa 3".
¡Ah! y no podemos olvidar otra irrupción, entre las dos últimas generaciones, nos referimos a "Rumasa" que tocaba todos campos empresariales, que si, luchaba contra el paro ¡pero a que costa!. Cuando le parecía daba liquidez a las empresas dejándolas arruinadas, con grandes deudas a la Seguridad Social, paro que costeábamos todos los españoles y la obligación del estado de hacerlas viables a base de dinero público; no sin antes enviar, como ha quedado demostrado, todos los beneficios a bancos suizos. Pasaban unos años y regresaba sucumbiendo "de mártir", por los mismos derroteros: creando nuevas empresas con la denominación de "Rumasa 2" y ocurrió lo mismo, pero aun más agravante ya que afecto a pequeños ahorradores; esta vez creaba depósitos llamados "Rumasinas" para ahorradores fieles o avariciosos que, engañados por los desorbitados rendimientos que ofrecía, al cerrarse el circo todo lo perdieron. Podíamos decir que era un gran fraude de guante blanco. Esperemos que no vuelva a surgir "Rumasa 3".
¿Y qué decir de los especuladores del ladrillo?
Construían
pisos por valor de 10, los vendían por 20 y a los dos años o antes, el comprador
de ese mismo piso lo revendía por 40. Más de dos décadas de verdadera locura
inmobiliaria. Principales causas del endeudamiento de los españoles a través de las
hipotecas.
Llovían las subvenciones desde Europa; nos daban una fortuna por plantar viñas y luego a los dos años otra fortuna por arrancarlas. Llegaba un momento en el que los viticultores no sabían si tenían que plantar o arrancar.
Llovían las subvenciones desde Europa; nos daban una fortuna por plantar viñas y luego a los dos años otra fortuna por arrancarlas. Llegaba un momento en el que los viticultores no sabían si tenían que plantar o arrancar.
Por
supuesto que todos estamos de acuerdo que esto es imposible que se sostenga así,
pero… hay que empezar a recortar por el vecino, que lo mío son todo
derechos.
Y de la 3ª generación
(desde 1990 en adelante), jóvenes y adolescentes de hoy, mejor no hablar porque…
Esa es la generación de la que dice el aforismo español: ¡Serás pobre, por ser
nieta de ricos! Que sólo con que nos descuidemos un poquito más, les vamos a
dejar a nuestros hijos o nietos un protectorado chino, donde serán unos esclavos
endeudados y tendrán unas historias legendarias sobre la prosperidad que crearon
sus abuelos, empeñaron sus padres y son incapaces de imaginar los
nietos…
No nos olvidemos de la corrupción de la clase política actual. Hemos perdido un poco el horizonte de nuestras vidas. Ahora consideramos como principal premisa de vida “el dinero” y nos movemos a su alrededor con ese nuevo estilo de vida de todo por aquél. Todos sabemos que el dinero es necesario para hacer frente a todas nuestras necesidades, que no son pocas en época de crisis, pero nos referimos a ese afán de algunos por enriquecerse fácilmente. Estos comportamientos crean una dependencia hacia el dinero, que los individuos que lo sufren no se sacian nunca y en consecuencia se convierten en infelices y esclavos de él, olvidándose de otros valores más humanos: dignidad, solidaridad, respeto, amistad etc.
¡Ah! y no hablemos del nuevo Estatuto de los Trabajadores que permite contratar a un trabajador por 3 ó 4 horas diarias, y todos sabemos que trabaja más horas, pagado con dinero negro. Otro fraude al alcance de empresarios con poca conciencia.
Demos las gracias a nuestros padres y a toda esa generación que nos regaló un país próspero, que nos hemos encargado de arruinar, entre todos, porque todos hemos aplaudido la locura”.
¡¡¡CUIDADO!!! Estamos a tiempo de cambiar el rumbo del barco que está a punto de naufragar. Si somos incapaces de volver a los valores con los que se construye una sociedad sostenible, nos hundiremos. Antes valorábamos más la honradez. la previsión y el esfuerzo. Que nadie me considere retrógrado al enaltecer tanto los valores de nuestros mayores, no dejo de reconocer que la actual calidad de vida de los españoles es muy superior a la anterior; sin embargo aquellos pusieron los cimientos para esta mejora y nosotros hemos de tratar, corrigiendo nuestros comportamientos, dejar a nuestros hijos y nietos una sociedad más justa y con una calidad de vida, al menos, igual o mejor que la que nos encontramos.
No nos olvidemos de la corrupción de la clase política actual. Hemos perdido un poco el horizonte de nuestras vidas. Ahora consideramos como principal premisa de vida “el dinero” y nos movemos a su alrededor con ese nuevo estilo de vida de todo por aquél. Todos sabemos que el dinero es necesario para hacer frente a todas nuestras necesidades, que no son pocas en época de crisis, pero nos referimos a ese afán de algunos por enriquecerse fácilmente. Estos comportamientos crean una dependencia hacia el dinero, que los individuos que lo sufren no se sacian nunca y en consecuencia se convierten en infelices y esclavos de él, olvidándose de otros valores más humanos: dignidad, solidaridad, respeto, amistad etc.
¡Ah! y no hablemos del nuevo Estatuto de los Trabajadores que permite contratar a un trabajador por 3 ó 4 horas diarias, y todos sabemos que trabaja más horas, pagado con dinero negro. Otro fraude al alcance de empresarios con poca conciencia.
Demos las gracias a nuestros padres y a toda esa generación que nos regaló un país próspero, que nos hemos encargado de arruinar, entre todos, porque todos hemos aplaudido la locura”.
¡¡¡CUIDADO!!! Estamos a tiempo de cambiar el rumbo del barco que está a punto de naufragar. Si somos incapaces de volver a los valores con los que se construye una sociedad sostenible, nos hundiremos. Antes valorábamos más la honradez. la previsión y el esfuerzo. Que nadie me considere retrógrado al enaltecer tanto los valores de nuestros mayores, no dejo de reconocer que la actual calidad de vida de los españoles es muy superior a la anterior; sin embargo aquellos pusieron los cimientos para esta mejora y nosotros hemos de tratar, corrigiendo nuestros comportamientos, dejar a nuestros hijos y nietos una sociedad más justa y con una calidad de vida, al menos, igual o mejor que la que nos encontramos.